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¿Cómo funciona una nevera de gas natural?

como funciona una nevera a gas natural

El gas natural es un combustible que se utiliza en la refrigeración con amoníaco, lo que también se conoce como refrigeración por absorción. Otros combustibles disponibles son el propano, el queroseno, el butano y la electricidad.

Hay algunos fabricantes que producen neveras que funcionan con varios combustibles, como el propano o la electricidad, para satisfacer las necesidades de los clientes que tienen una fuente de energía restringida. Los dueños de vehículos recreativos son uno de los ejemplos de esta clase de clientes.

La refrigeración con amoníaco no posee partes móviles mecánicas, y la nevera trabaja de la misma manera sin tener en cuenta la fuente de combustible.

Funcionamiento de los refrigeradores a gas natural

Veamos paso a paso como es el proceso de enfriamiento de este tipo de neveras.

La caldera

La primera etapa de una nevera de amoníaco es una caldera, que necesita una fuente de calor que caliente el agua y la mezcla de amoníaco en su parte interior. El gas natural, el propano, el butano o el queroseno prenden un quemador, y la electricidad alimenta un sistema de calefacción. Como el amoníaco hierve a una temperatura inferior a la del agua, una gran parte del amoníaco pasa a un estado gaseoso, el cual se mueve a la siguiente parte del proceso. Entretanto, el agua y el amoníaco todavía en estado líquido regresan a la caldera.

El condensador

El vapor de amoníaco ingresa a un condensador, el cual esta equipado con aletas y serpentines que lo ayudan a enfriar el vapor. Dado que el amoniaco ha perdido el agua con la que se mezcló en la caldera, el resto del compuesto es amoniaco puro y seco. La aleta de enfriamiento absorbe suficiente calor del vapor de amoníaco como para que comience a recobrar su estado líquido. Como líquido, el amoníaco puede desplazarse hacia el evaporador.

El evaporador

Los frigoríficos de amoníaco alimentados con gas natural utilizan la evaporación como un medio de enfriamiento para conservar frío el interior de la nevera y su contenido. A lo largo del tiempo, el amoníaco líquido pasa del condensador al vaporizador y se combina con el hidrógeno que se desprende de otra parte del proceso de enfriamiento. El gas hidrógeno tiene una reacción rápida con el amoníaco líquido, provocando que se evapore y se enfríe mucho. El amoniaco frío es lo que absorbe el calor de la nevera, refrescando su interior. Cuando el amoníaco se enfría, vuelve a su forma líquida de nuevo.

El absorbedor

El amoniaco y el hidrógeno, una solución débil, se introducen en un absorbente por gravedad. En el interior del absorbedor hay agua del proceso de ebullición y una potente solución de amoníaco. La solución potente absorbe el amoníaco más flojo y libera hidrógeno gaseoso, que regresa hacia el evaporador. El agua y el amoníaco se devuelven a la caldera para iniciar el proceso otra vez.